El partido tuvo buenos momentos para cada equipo y en la búsqueda y rédito de puntos, fue Australia el que más consiguió sobre todo, en el final mismo del match al anotar dos tries en los últimos tres minutos, que estiraron las diferencias en el marcador un tanto injustamente, en un cotejo que fue bastante más parejo que lo que indica la placa final.

Los australianos -sobre todo en el desarrollo de la segunda mitad- complicaron en defensa a los chicos argentinos tomando muchos riesgos al intentar luchar todas y cada una de las pelotas en el breakdown. Por cierto, consiguieron hacerlo provocando que se hiciera lenta la salida hacia afuera o bien, pescando la misma. De todas formas, esto no impidió que Los Pumitas mantuvieran la iniciativa. Intentaron por todas las vías, pero no pudo ser.

Esto resultó a la inversa en la primera etapa, cuando fue el equipo aussie el que dominó las acciones, el que controló pelota y campo, y obligó a Los Pumitas a desdoblarse en defensa con muy buenos tackles y orden, pero la mayor parte del tiempo, en campo propio. Para destacar, el gigantesco try de Mateo Carreras en esa etapa que una vez más, vulneró un ingoal en este certamen.

Con estas palabras, el Head Coach José Pellicena se expresó sobre lo acontecido en el partido “Fue muy duro. Hicimos un gran esfuerzo, pero no alcanzó. Nos costó tener la pelota en el primer tiempo, cuando defendimos mucho y eso, terminó desgastándonos para el final. Australia es un equipo ordenado, intenso, maduro y no hay que quitarles mérito porque fueron aplicados e hicieron su partido”.

“Hicimos un buen trabajo defensivo y ofensivo. Con la pelota generamos situaciones, pero por ahí nos falto controlarla un poco más, porque tuvimos chances. También nos faltó un poco más de suerte en la obtención”.

Sobre el torneo en sí, en el desarrollo del mismo para los chicos y en general, dijo “Estamos muy contentos con como el equipo fue mejorando partido a partido. Los chicos crecieron en todos los aspectos, desde el desarrollo personal y humano como también rugbístico. Como en todo, hay mucho por mejorar -porque siempre lo hay- pero debemos destacar que muchos jugadores dieron un paso adelante técnica y rugbísticamente. Tuvieron un excelentísimo mundial”.

Para cerrar, José Pellicena indicó que “El esfuerzo general de todo el plantel, de todo el staff, fue espectacular. Se conformó un grupo humano sensacional y eso es lo más lindo para un entrenador. Estoy muy orgulloso de lo que hemos conseguido generar entre todos. Eso es lo que va a repercutir positivamente en el futuro mediato e inmediato”.

Culminó así un nuevo Mundial Juvenil. El año que viene, tendremos la oportunidad de alentar a nuestros jugadores y disfrutar de las mejores figuras del futuro del rugby internacional en casa, porque todos se harán presentes en Rosario y Santa Fe para la edición 2019.