En el comienzo fueron una aplanadora y asi lo desmiraron desde el debut ante Brasil, donde los dirigidos por Santiago Gómez Cora, quien eligió un plantel muy similar al que juega el Circuito Mundial, no sufrió ningún tipo de sobresaltos para quedarse con la victoria. Los tries llegaron por parte de Marcos Moroni, Bazán Vélez en dos oportunidades, Luciano González, Gastón Revol y Nicolás Roger, para llevarse la victoria por 40-0.
En su segunda presentación enfrentaron a Portugal, a quien le propinaron la mayor goleada del Día 1. El triunfo fue por un contundente 47-0, en un encuentro que tuvo los tries de Álvarez Fourcade, Luciano González en dos ocasiones, Rodrigo Etchart, Juan Martín González, Lautaro Bazán Vélez y Franco Sábato.
El cierre de la jornada fue ante Canadá, que también había ganado en sus dos primeras presentaciones, y en la previa llegaba como el rival más complicado de la zona. El comienzo del encuentro fue adverso para los argentinos, con mucha presión ejercida por los norteamericanos, quienes llegaron al try apenas comenzado el encuentro y se pusieron 5-0 arriba. Recién sobre el final de la primera etapa, una gran jugada de Franco Sábato y la conversión de Mare le dieron la ventaja a Los Pumas 7s para irse al descanso 7-5.
En el complemento fue todo para los argentinos, que con los tries de Marcos Moroni, Bazán Vélez, Lucho González y Álvarez Fourcade, pusieron el definitivo 33-5 ante Canadá y se quedaron con el primer lugar de su zona.
Argentina obtuvo triunfos ante Brasil (40 a 0), Portugal (47 a 0) y Canadá (35 a 7) para concretar un gran primer día y ratificar su chapa de candidato en el certamen disputado en el Campus de Maldonado.
Solo el primer tiempo del último partido del día ante Canadá mostró al conjunto nacional en leves aprietos, más allá de que logró irse al descanso en ventaja por 7 a 5 tras una gran jugada personal del wing de Alumni, Franco Sábato.
En el complemento, la jerarquía individual y colectiva de los dirigidos por Santiago Gómez Cora apareció en toda su dimensión, y con cinco tries pusieron cifras definitivas (35 a 5) que reflejaron la diferencia entre ambos seleccionados.
En la jornada dominical, se impuso a Estados Unidos por 31 a 7; y derrotó en semis a Alemania por 40-0. Pero en la final estuvo mas dubitativo, y eso demostró ya que ganando el juego y con pocos segundos para consagrarse, Chile robó la pelota y con tiempo cumplido marcó el try y la conversión que lo declaró campeón del certamen uruguayo.