Central tenía a Campaña a una hectárea, pero en el desarrollo no la pasaba tan mal con el correr de los minutos.
El segundo tiempo seguía mostrando al local con las mejores intenciones, pero con una evidente carencia de inventiva. ¿Y el Ferro en ataque? Bien, gracias.
La salida de Galeano, impidió a la visita continuar en su zona de confort. Para colmo de males, llegó el estupendo gol de Roa, que desató una tormenta en el conjunto santiagueño. Totalmente desdibujado, recibió cachetazos lapidarios en el último cuarto de hora. Tercera derrota en el 2020 ante un grande y sin convertir goles. Los grandes le quedaron grande a Central.
Es sabido que Coleoni debe administrar pobreza. Pobreza que, en algunos casos, él mismo generó con algunas decisiones. No debe ser fácil elegir lo mejor en un plantel tan discreto. Las carencias abundan. Vaya paradoja. Ahora bien, ¿hasta cuándo el DT le seguirá dando oportunidades a jugadores como Cure, Joao o Cristaldo? Exasperan hasta a un monje tibetano. Tuvieron la oportunidad de cambiar su imagen en la Copa Argentina y lo lograron: la dejaron peor de lo que estaba.
14 puntos. Si, 14 puntos se necesitan para llegar a los 40 que dejarían a Central Córdoba fuera del descenso. Tiene 11 batallas en la Copa de la Superliga para conseguirlos. En los números no está lejos. En el juego sí.
Por el Gringo Ceballos