El Clásico comenzó marcado por las defensas, sobre todo por la de un Real Madrid que salió sin reservarse nada. Fruto de ello y de una gran concentración atrás mandó en el primer cuarto, aunque con distancias cortas (18-14). Campazzo (5 puntos y 3 asistencias) y Calathes (6) mantuvieron un intenso duelo por el control del juego, pero fue Deck el factor diferencial en este inicio con un enorme trabajo sobre Mirotic. El argentino sumaba 6 puntos y Abalde otros 5. El Barça encontraba en el rebote ofensivo a su mejor aliado.

Partido abierto
La situación cambió a la inversa en el segundo cuarto. El Real Madrid siguió arriba hasta el minuto 16 con el 31-25. El mejor Llull, con 5 puntos seguidos, neutralizaba la primera embestida azulgrana. Pero el Barça se desenvolvió mejor dentro de las imprecisiones del partido. Le acompañó su defensa y un conjunto blanco que no acertaba en ataque. Liderados por Mirotic y Davies, los azulgranas fueron comiéndole el terreno a los madridistas, que acabaron el primer tiempo uno abajo (31-32).

El paso por vestuarios no cambió la dinámica de igualdad del encuentro. El acierto en el triple del Barça le permitió mínimas rentas durante casi todo el tercer cuarto. Abrines ponía el 42-47 en el minuto 27. Sin embargo, el Real Madrid no desesperó y siguió buscando soluciones. Reajustó su defensa y mejoró en ataque con Campazzo y un gran Abalde. El alero asumió la responsabilidad ofensiva en su segundo encuentro de blanco y los de Laso encadenaron un 6-0 para darle de nuevo la vuelta al marcador al final del tercer cuarto (50-49).

El Madrid sacó su ADN de campeón
El cuarto definitivo no arrancó bien para los blancos, que encajaron un 0-7 de parcial en dos minutos (50-56, min. 32). Más allá del resultado, lo que inquietaba era el ritmo de juego más pausado y conveniente para los azulgranas. En ese momento, apareció Campazzo, a la postre MVP, para darle la energía y decisión que necesitaba el Madrid. Los blancos se reactivaron y lograron un 13-2 con 7 puntos seguidos del base argentino. Del 50-56 se pasó al 63-58 a falta de tres minutos. La tensión incrementaba y Jasikevicius y Laso se repartían las técnicas. El Barça igualó el partido a 67 entrado el último minuto.

Pero Campazzo ya estaba en modo estrella y su equipo arropándole en defensa. Un canastón suyo ponía el 69-67 a 26 segundos. Rudy provocaba la pérdida de Hanga en la siguiente jugada con un robo marca de la casa y entre Campazzo y el alero balear, desde la línea de personal, cerraban una gran victoria por 72-67. Los de Laso arrancan la temporada de forma brillante con el primer título de la temporada.

De este modo, Campazzo volvió a calzarse el trofeo de ‘Jugador más valioso’ (MVP), tal como ocurrió en la edición 2019, cuando Real Madrid también se adjudicó el título, tras superar en la definición al mismo adversario, pero por 89-79.

Mientras que el escolta bonaerense Nicolás Laprovíttola (ex Lanús y San Antonio Spurs de la NBA) fue utilizado poco en el conjunto ‘merengue’ (6m.) y apenas colaboró con 2 puntos, 2 rebotes, una asistencia y un recupero.

En Barcelona, en tanto, el alero cordobés Leandro Bolmaro acumuló 4 puntos (1-3 en dobles, 0-2 en triples, 2-2 en libres) y un rebote en 14m.

El mejor valor del elenco ‘blaugrana’, que había eliminado al Baskonia (del marplatense Luca Vildoza) en una de las semifinales, resultó el alero Nikola Mirotic, que terminó con un saldo de 22 tantos y 7 rebotes en los casi 29 minutos que permaneció en el campo de juego.

Con esta victoria, Real Madrid sumó su séptimo título en el historial de la competencia, luego de haber festejado también en las ediciones 1984, 2012, 2013, 2014, 2018 y 2019.

El Madrid puede perder a Campazzo y a Deck
El Real Madrid conquistó el primer título de la temporada, su tercera Supercopa seguida y ante su máximo rival, un Barcelona construido para ganarlo todo. Golpe de autoridad y autoestima de los blancos tras su reciente fiasco liguero, aunque sobre la fotografía de celebración de los campeones se ciernen algunos nubarrones que podrían difuminarla.

El primero y más oscuro, la segura marcha de Facundo Campazzo a la NBA. El MVP de la Supercopa y de los cuatro últimos títulos conquistados por los blancos, ya ha empezado a pagar parte de su cláusula de seis millones de euros. En cuanto se abra el mercado de fichajes de la NBA el argentino cruzará el charco. ¿Será el camino de Deck también?

Los Wolves probable destino de Campazzo
Su destino más probable serían los Wolves, donde su compatriota Pablo Prigioni es entrenador asistente. Allí sólo tienen a D'Angelo Russell como base con contrato para la próxima temporada. También suenan los Mavericks, donde podría relevar a JJ Barea para llevar el timón junto a Doncic. Y no hay que descartar a los Spurs. Ginobili ha hablado muy bien de él y a Popovich le gustó en el pasado Mundial, donde tuvo oportunidad de verlo en acción.

El agujero que dejará Campazzo en el Madrid será considerable. El club, conociendo su salida, finalmente no 'cortó' a Laprovittola, que junto a Llull y al joven Alocén llevarían el timón. Un trio suficiente para acometer la mayoría de partidos de la Liga ACB con garantías, pero insuficiente ante los clubes punteros de la Euroliga, entre ellos el Barcelona. ¿Qué hubiese pasado en la final de la Supercopa ante el Facu? La sombra de su pequeña figura es alargada. Inmensa.

El santiagueño con un contrato y cláusula de salida obsoletos
Deck terminará su contrato esta temporada y aún no ha renovado. Las conversaciones ya se iniciaron hace semanas y aún no están encarriladas. El club, con Juan Carlos Sánchez como director de la sección a la cabeza, apostó en su momento por un jugador que en España era desconocido para una de sus plazas de extranjero, pero con el tiempo el alero de Colona Dora se ha revalorizado tanto con su buen rendimiento que su contrato ha quedado obsoleto.

Dos franquicias quieren a "Tortuga"
El Madrid parece estar más por la labor, pero si se duerme, puede llevarse una sorpresa muy desagradable. Igual que su contrato se ha quedado desfasado, también lo ha hecho su cláusula de salida para la NBA, muy asequible para esta temporada. Y hay dos franquicias de la Liga estadounidense que han mostrado interés por el jugador. Eso ha puesto en guardia al club blanco, para el que sería una hecatombe perder de una tacada a Campazzo y a Deck una vez iniciada la temporada.

Gaby no lo dejó anotar a Mirotic
"Tortuga" es uno de los grandes baluartes defensivos del conjunto de Laso. Su intensidad, fuerza y determinación se antojan necesarios en un baloncesto cada vez más físico, como demostró en la final de la Supercopa, donde menguó la producción de Mirotic con una defensa ejemplar (no anotó ni un solo punto mientras el argentino le defendió) y palió el apagón ofensivo de su equipo con varias embestidas salvajes a canasta.

La pelota está en el alero del Madrid, que debería cerrar cuanto antes la negociación para su continuidad. Si demora mucho más el posible acuerdo, puede encontrarse en apenas un mes sin Campazzo y sin Deck. Sería un portazo mayúsculo para un proyecto que se vería seriamente resquebrajado para esta temporada, porque la foto de campeones de la Supercopa no habría visto la luz de no ser, entre otros, por la decisiva aportación de los dos argentinos.