|
||
2015-08-23 Central Córdoba volvió a sumar de visitante al conseguir un empate ante Juventud Unida de Gualeguaychú, 0/0, por la trigésima fecha del de la Primera B Nacional. El encuentro se disputó en el estadio de los Eucaliptos, y dejó conforme a los ferroviarios que consiguieron sumar en una cancha difícil, ante un rival que sumó el quinto partido consecutivo sin conocer la derrota y sigue en el pelotón de los que buscan un lugar en el reducido por el segundo ascenso.
El partido no fue bueno. Juventud estuvo lejos de mostrar el despliegue futbolístico de otros encuentros. Quizá la ausencia de Diego Barrado –que entró a los 15 del complemento y le cambió la cara al equipo entrerriano- fue demasiado difícil de suplir para el mediocampo local. Ángel Gómez ocupó el lugar del ex Boca Unidos, pero la intermitencia con que entró en contacto con la pelota impidió que el volante se convierta en la manija del equipo de mitad de cancha en adelante. De hecho, fue Central Córdoba el que ganó terreno ajeno y, de la mano de un inspirado Matías Pato, generó las primeras llegadas del partido. Pero Marco Prieto no estuvo fino en la última puntada y desperdició las dos primeras: con pelota dominada y llegando por derecha, los remates del 9 se fueron afuera ante la atenta mirada de Perelman. El partido no se terminaba de armar nunca y Juventud no jugaba bien. Demasiadas separadas sus líneas y una sola fórmula para intentar generarle problemas al buen arquero Calviñi: el centro al área. Fornillo por derecha y Gauna por izquierda, se cansaron de buscar la cabeza de Zampedri. Pero no era la tarde del goleador, que se mostró demasiado fastidioso porque la pelota no le llegaba, y cuando logró ganar de arriba se encontró con la segura respuesta del Uno santiagueño. Otro que logró conectar un buen centro de Gauna fue Bandiera, pero el rosarino también se encontró con la figura de Calviño, que de a poco se fue erigiendo como una de las figuras en su equipo. Otro de los puntos altos en el equipo de Luis Medero fue Pato Ríos, jugaba y hacía jugar, pero demasiado lejos del arco para inquietar a Perelman. Con más pena que gloria, se fue el primer tiempo. No iba a ser difícil presenciar unos segundos 45 minutos mejores que los primeros. Y así fue. El ingreso de Diego Barrado (por Gómez) a los 14’ del complemento, le dio mayor volumen de juego al local, que se animó e inclinó la cancha. Fornillo, de buen partido y totalmente recuperado del golpe en la rodilla, tomó de primera un rebote y probó desde el borde del área, pero su remate se fue rozando el segundo poste. En la visita ingresó Facundo Silva para darle claridad y verticalidad al Ferroviario de mitad de cancha en adelante. Si bien no se jugaba bien, el ingreso de Barrado, de un lado, y de Silva, del otro, armó otro partido. Además, decidido a quedarse con los tres puntos, Acosta mandó a la cancha a Claudio Pombo y Mateo Acosta. Pero, a pesar de un par de buenas intervenciones del juvenil por izquierda, no lograron aportar claridad –ni mucho menos gol- a la delantera decana que extraño a un Zampedri ausente y fastidioso. Sin fútbol y con pocas ideas, igualmente Juventud buscó ganarlo hasta el último segundo. Hasta el propio Villalba –junto a Bandiera, de lo mejor en el local- se animó y probó desde afuera, pero su buen remate chocó con la estirada de Calviño y en el rebote no llegó Mateo Acosta. Después de esa no hubo tiempo para más. El empate, le sentó mejor al ferroviario, que volvió a sumar después de la dura derrota como local ante Independiente Rivadavia (3-1), y en la próxima fecha recibirá a Patronato de Paraná que marcha en la cima del campeonato.
Síntesis |
|
|