El amor por los colores del club de barrio volvieron a sobresalir en una final como en la viejas épocas, donde la parcialidad decía presente en los juegos de la Asociación Capitalina o mejor de la Federación Santiagueña de Basquet Ball, pugnando alentar a ese club que creció con cada uno en todos los rincones de la provincia. El Pre Federal fue propicio para revalorizar todos esos valores; el sentido de pertenencia a un equipo del cual todos sintieron como propios en la canchita del barrio, hoy estadio techados, con piso de parquet, pero siempre con los mismos vecinos que buscan seguir dándole la impronta necesaria para buscar el crecimiento de las instituciones.
Desde el Oeste y el Norte se llegaron al centro de la ciudad para alentar en el último partido, así el Barrio Mosconi y Jorge Jorge Newbery dijeren presente con sus hinchas en la cancha de Independiente BBC. La final hasta tuvo gestos de grandeza en varios sentidos; esos que hace crecer el deporte sin importar el resultado. En el juego la superioridad de Nicolás Avellaneda fue clara, siempre estuvo arriba en el marcador, y con varios jugadores de experiencia demostró ser un justo campeón. Jorge Newbery que vio la supremacía del adversario reconoció la victoria y fue un justo rival.
Desde el inicio fue el Celeste que tomó la posta para quedarse con el primer parcial por 31/15; luego se emparejó la cosa en el segundo cerrando esos diez minutos 22/20, pero con una ventaja al termino de la primera etapa para los del barrio Mosconi por 53 a 35.
En el complemento, bajaron las intensidades, pero nuevamente fue el ganador que estiró diferencias para llevarse el chico 29/19 (82/54).
El último cuarto solo fue un trámite para cumplir, saltaron al campo los juveniles y terminó con un escaso 14/11 para sentenciar el 96 a 65. A un minuto de que sonara la chicharra el festejo desde el banco y los hinchas en la platea elevaron ese dale campeón para terminar coronando esa alegría con la entrega de premios, al primero como al segundo.
Las claves
El campeón mostró cartas para quedarse con la gloria; la vuelta a un equipo santiagueño de Víctor Hugo Cajal fue clave en la conducción, o la experiencia de Juan Ángel López, Martín Balteiro, Diego Righetti; el porte de Maximiliano Cerioni, Máximo Vélez que con su contundencia fue infalible para reventar la red del frente. Pero no tuvieron menos mérito A. Lobo, Nahuel Salazar, Gonzalo Noriega, F. Coronel; o hasta Luciano Tarchini que tuvo a su padre Alejandro Tarchini como Director técnico y a su hermano Lucas como Ayudante sentado en el banco de los relevos; y Gabriel Lazarte que fue el preparador físico para dejar en buen estado a los que saltaban al rectángulo en el club de sus amores.
En el equipo se vio a la familia del Celeste y eso se tradujo luego a un buen funcionamiento en el campo de juego para coronar un gran certamen.
Párrafo aparte para los gladiadores del Club Jorge Newbery, que hicieron un gran torneo y fueron dignos subcampeones de la mano de Corvalán como DT.
Ahora JN hora junto a Nicolás, y Sportivo Colón (su eterno rival en el barrio), son los tres clasificados y defenderán los colores de la bandera de Santiago del Estero en el próximo Torneo Federal que organizará la Confederación Argentina de Básquetbol.